Gustavo Carabajal y Martha Pelloni denunciaron que los niños son vendidos para adopciones o explotación en la industria de la pornografía infantil.
Ya pasaron 18 días de la desaparición de Loan Peña en Corrientes y a pesar de que la tía del pequeño, Laudelina Peña, declaró que el menor murió atropellado por Carlos Pérez, principal acusado del caso, todavía son pocas las certezas sobre qué le ocurrió y dónde está. Para el Ministerio de Seguridad, la declaración de la mujer es válida y de esta manera se incrementaron los rastrillajes y las pericias en la localidad de 9 de Julio.
Sin ir más lejos, la estructura de los rastrillajes se modificaron y se intensificó la búsqueda en los campos aledaños a la casa de la abuela del nene de 5 años. Además, los fiscales federales que investigan la desaparición, Mariano de Guzmán y sus colegas Marcelo Colombo y Alejandra Mangano, estos dos últimos a cargo de la PROTEX, el área de la Procuración que investiga delitos de trata. pidieron detener a Laudelina y la jueza Cristina Pozzer Penzo se negó.
Mientras todo esto ocurre, la desaparición de Loan sacó a la luz una realidad estremecedora: las redes de trata pagan hasta US$50,000 por niños secuestrados, superando el lucro del tráfico de drogas y armas. El periodista especializado en policiales, Gustavo Carabajal y Martha Pelloni, fundadora de la Red Infancia Robada, denunciaron en la mesa de Mirtha Legrand que los niños son vendidos ilegalmente para adopciones o explotación en la industria de la pornografía infantil, donde las ganancias son astronómicas. “50.000 dólares se paga un chico hoy,¡ 50.000 dólares!”, sostuvo Carabajal en el programa que se emite por El Trece.
Esta es la información que manejan las organizaciones que combaten la trata de personas y la hermana Martha adelantó que Estados Unidos lidera en casos de secuestros infantiles, exacerbado por la pobreza estructural que aumenta la vulnerabilidad en comunidades marginadas. “El delito de trata está primero, antes que la droga y que el tráfico de armas. A veces no es precisamente para venderlo claro, sino que también para adopción ilegal o la filmación de prostitución, los prostituyen porque esas filmaciones se venden a sumas siderales. Hay mucho para considerar en estas regiones de vulnerabilidad y pobreza estructural”, destacó Pelloni.
La reconocida activista, conocida por su incansable lucha contra la desaparición de menores, expresó su profunda preocupación por el manejo del caso Loan y criticó abiertamente los posibles encubrimientos políticos que podrían estar obstaculizando la investigación. Durante el programa, advirtió sobre “una larga historia de encubrimientos que comienzan políticamente, sin importar quién esté en el poder”.
Expresó su descontento por la falta de colaboración efectiva entre las fuerzas de seguridad locales y las autoridades municipales, lo que, según ella, “solo agrava la situación” y demora la resolución. “Hay una larga historia de encubrimientos que comienzan políticamente, sin importar quién esté en el poder. La falta de colaboración efectiva entre las fuerzas de seguridad locales y las autoridades municipales solo agrava la situación”, advirtió la religiosa durante el programa.
Por su parte, Carabajal tampoco escatimó críticas hacia la investigación, cuestionó severamente la gestión del caso y advirtió que “se comenzó a investigar mal” lamentando las múltiples hipótesis -muchas de ellas fantasiosas- que aún no han conducido a ningún avance concreto. “Cuando no se descartan hipótesis o se manejan varias, es señal de que no se tiene nada sólido”, afirmó el periodista durante su intervención.