“EL QUE NO SALTA ES UN INGLES”: MILEI VOLVIÓ A “SACRALE EL CUERPO A MALVINAS” Y A HABLAR MARAVILLAS DE THATCHER “ELLA FUE BRILLANTE” MANIFESTÓ LA INMUNDICIA
El presidente descartó que la visita del canciller británico a las Islas en febrero haya sido una provocación. El 2 de abril no es una fecha más para el pueblo argentino. Aquella jornada, pero de 1982, la dictadura cívico-militar inició el desembarco de tropas en las islas Malvinas, usurpadas por Inglaterra desde 1833, con la intención de ocultar la gravísima situación social, política y económica a la que habían conducido al país. A las 8:45, aterrizó en el aeródromo de Puerto Argentino el primer avión de la Fuerza Aérea Argentina (C-130 Hercules TC-68) que llegaba a las Islas. Ese mismo día llegaron también el Equipo Control de Combate y el Grupo de Operaciones Especiales. El conflicto bélico duró solo dos meses y medio, fue corto para algunos. Pero lógico que lo sea, los soldados argentinos no estaban preparados. La guerra dejó un saldo de 649 bajas argentinas y más de mil suicidios motivados por secuelas y traumas de posguerra. El 15 de junio de 1982, tras 72 días de guerra, Leopoldo Galtieri, dictador y jefe de la Junta Militar, anunció por cadena nacional la negociación entre el “gobernador” de Malvinas, Mario Benjamín Menéndez, y el jefe de las tropas británicas (firmada el día anterior, es decir, el 14). Habló del retiro de las tropas argentinas de Puerto Argentino y de “cese de hostilidades”, sin nombrar lo que realmente fue: una rendición incondicional. En ese momento, Margaret Thatcher -que se ganó el apodo de Dama de Hierro tras la guerra por ordenar el uso de la fuerza en Malvinas y dio la orden de hundir al crucero General Belgrano- era la jefa de Gobierno más impopular en el Reino Unido desde la Segunda Guerra Mundial. Para el pueblo argentino, su apellido es una mala palabra. Para todos, menos para Javier Milei, que sigue revindicando su figura a pesar de lo que marca la historia. En una entrevista para la BBN, el presidente argentino volvió a referirse a las Islas Malvinas y volvió a remarcar el hecho de que están “en manos de Reino Unido”. Además, insistió en que “no existe una solución instantánea” para recuperarlas. “Si ese territorio está ahora en manos del Reino Unido, tiene derecho a hacerlo, no lo veo como una provocación. No vamos a renunciar a nuestra soberanía, ni vamos a buscar un conflicto con el Reino Unido”, sostuvo sobre la visita de David Cameron a las islas en febrero. Para el libertario, la recuperación del territorio “llevará tiempo” e implicaría una “negociación a largo plazo”. “Nosotros creemos que eso siempre tiene que ser hecho en el marco de la paz y como consecuencia de un proceso de negociación de largo plazo, donde se plantee una discusión adulta entre dos países que tienen mucho en común y tienen un elemento de discordia”, declaró Milei al ser consultado sobre “la hoja de ruta para que las islas Malvinas sean argentinas”. Frente a la pregunta sobre las razones por las que Reino Unido aceptaría sentarse a negociar, el libertario respondió: “Bueno, puede ser que hoy no lo quieran negociar y después, más tarde en el tiempo, sí lo quieran hacer. Muchas de estas posiciones a lo largo del tiempo han cambiado. Voy a tratar de convencerlos que ese territorio es argentino y que acorde a las especificaciones que se suele utilizar para definirlo de esa manera, Argentina tiene el derecho y la soberanía sobre las islas”. A modo de ejemplo, Milei hizo referencia a la entrega británica de la ex colonia de Hong Kong a China en 1997: Yo creo que es una negociación de largo plazo y que se puede establecer de la misma manera que pasó con China y Hong Kong. Podría tardar décadas. Me parece una posición mucho más seria y además tenemos un montón de cuestiones en la agenda que podemos trabajar en común y estamos dispuestos a hacerlo. Creo que es la manera adulta para hacerlo y sin dolor”. Al final de la entrevista, el líder de la Libertad Avanza se le volvió a referirse a su admiración por Thatcher, quien fue primera ministra durante la guerra de las Malvinas y cerró: “Criticar a alguien por su nacionalidad o raza es muy precario intelectualmente. He escuchado muchos discursos de Margaret Thatcher. Ella fue brillante. Hubo una guerra y a nosotros nos tocó perder. Eso no quiere decir que uno no pueda considerar que quienes estaban en frente eran personas que hacen bien su trabajo”. Esta no es la primera vez que Milei se deshace en elogios para con Thatcher. “En la historia de la humanidad, hubo grandes líderes. Thatcher tuvo un rol significativo en la caída del Muro de Berlín”, la había elogiado el economista durante el debate presidencial del año pasado. Durante el bloque de relaciones exteriores del último debate presidencial realizado en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires antes del ballotage, Milei mencionó a la ex primera ministra británica y se ganó el repudio de todos. El tema salió luego de que el candidato de Unión por la Patria (UP), Sergio Massa, recordara que su rival había dicho durante una entrevista que Thatcher era su “ídola”. Durante el bloque de relaciones exteriores del último debate presidencial realizado en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires antes del ballotage, el candidato a presidente de La Libertad Avanza (LLA) mencionó a la ex primera ministra británica y se ganó el repudio de todos. El tema salió luego de que el candidato de Unión por la Patria (UP), Sergio Massa, recordara que su rival había dicho durante una entrevista que Thatcher era su “ídola”. En ese contexto, Massa señaló: “Primero, Thatcher es una enemiga de la Argentina. Ayer, hoy y siempre. Y nuestros héroes son absolutamente innegociables por más que para vos sea una figura Thatcher, que para mí no lo es. Para mí es una enemiga de la Argentina. Defiendo la soberanía de Malvinas y creo además que sería importante que digas si los kelpers tienen derecho a la autodeterminación o no, porque dijiste que la tenían”. Para responderle, el liberar usó